En blanco es como se pone nuestra mente cuando pensamos en lo que queremos para nuestra vida y a al mismo tiempo se llena de pensamientos que son deseos, momentos y sensaciones, que deseamos se vuelven realidad, porque insistimos en que siempre pasen las cosas como nos imaginamos, si al final sabemos que las cosas nunca pasan como planeamos. Si la vida te puede cambiar en un instante, para que planificar toda nuestra vida, si es mejor ver las sorpresas que nos trae, vivir los detalles y momentos que nos brindan la vida minuto a minuto es lo que le da el sentido a levantarse cada día.
La verdad es que yo pienso todo el tiempo lo que quisiera tener, hacer o lograr, pero ahora veo que los momentos más divertidos y de más alegría que he tenido han sido los que han llegado a mi sin darme cuenta, sin imaginar que iban a pasarme, los que nunca me hubiera imagina. Por eso ahora he decidido vivir con esa filosofía de vivir cada segundo.
Nos es que deje de lado pensar en cómo sería la vida es dejar de desear que es lo único que queremos para nuestra vida , o más bien dejar la puerta abierta para las oportunidades espontaneas que nos ofrezca esta.
He aprendido que aunque tengas algo muy importante o algo muy especial y se nos va de las manos ya sea por nuestra culpa o por causas ajenas a nosotros, son cosas que desde un principio sabíamos que podían terminar aunque hubiéramos querido que acabe, nunca te arrepientas de algo que te hizo reír o llorar eso te hace la persona que eres, pasar por momentos así te volverá la persona que eres. Y siempre encontraras algo igual o más grande y especial que eso que ya tenias, es solo cuestión de saber tener paciencia o más bien de tener las fuerzas y los deseos de volver levantarse.
Trata siempre se sonreír, de vivir y de amar como el deseo de querer hacerlo, dale oportunidades a la vida de que te sonría, suena muy optimista y muy de fantasías.
Pero siempre recuerda que para poder llorar por algo, tuviste que reír primero.